6 motivos (erróneos) para comer
1. Porque es la hora de comer! Desde pequeños nos inculcaron los horarios de las comidas por motivos organizativos y sociales y nuestro organismo tiene que luchar contra sí mismo continuamente para adaptarse.
2. Porque me apetece ese sabor!Esto no es hambre, estaría más cerca de la gula. Queremos disfrutar de la recompensa transitoria de algún alimento, por lo general dulce, aún sin necesitarlo. Es el caso de ver algo apetecible en un escaparate y comprarlo sin tener hambre.
3. Por si acaso…Es posible que nuestros horarios no nos permitan comer cuando aparezca el hambre física, por lo tanto prevemos esta situación y adelantamos o retrasamos el momento de la comida.
4. Porque mis compañeros de mesa siguen comiendo! Es un hambre por asociación y es la que nos hace pedir el postre aún estando saciados simplemente porque otro comensal también lo ha pedido.
5. Para animarme! Determinados alimentos, en general aquellos ricos en azúcares simples, proporcionan una sensación momentánea de placer que puede animarnos durante unos momentos. Si cambiar el mundo fuera tan fácil.
6. Porque el cuerpo me pide algo dulce!Este fenómeno es conocido como craving y está relacionado con un lío hormonal y de neurotransmisores en nuestra cabeza, asociada con los sistemas de recompensa. Realmente tu cuerpo no necesita ese azúcar para nada.
Un motivo legítimo para comer.
Porque tu cuerpo tiene hambre. Reconocerás este momento porque no le harás asco a ninguna comida que te ofrezca, ya sea una pieza de brócoli o un chuletón de buey. No obstante, si no eres capaz de proporcionarle a tu cuerpo en este momento alimentos nutricionalmente densos, con alto contenido de nutrientes, volverás a sentir la sensación de hambre en poco tiempo porque no habrás saciado las necesidades funcionales de tu organismo.
Javier Soro
Médico Deportivo y co-fundador de CrossFit Alc.